Catálogo de aceros para herramientas de trabajo en frío

Catálogo de productos de acero para herramientas

Catálogo de aceros para herramientas de trabajo en frío

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¿Qué es el acero para herramientas de trabajo en frío?

Los aceros para herramientas de trabajo en frío son una clase crítica de aceros aleados, diseñados específicamente para operaciones de mecanizado donde la temperatura de trabajo suele ser inferior a 200 °C (390 °F), a menudo a temperatura ambiente. Esto los distingue de los aceros para herramientas de trabajo en caliente, que se utilizan para aplicaciones con temperaturas más altas (normalmente superiores a 200 °C y hasta 800 °C).

Clasificación

Los aceros para herramientas de trabajo en frío se clasifican sistemáticamente, principalmente por AISI (Instituto Americano del Hierro y el Acero), en tres grupos principales según su medio de enfriamiento y composición:

  1. Tipos de endurecimiento por aceite (serie O): Incluyen grados como O1, O2, O6 y O7.
  2. Tipos de aleación media endurecidos al aire (serie A): algunos ejemplos son A2, A3, A4, A6, A7, A8, A9 y A10.
  3. Tipos con alto contenido de carbono y cromo (serie D): este grupo incluye D2, D3D4, D5, D6 y D7. Los aceros tipo D se desarrollaron inicialmente para corte a alta velocidad, pero se utilizaron como aceros para matrices de trabajo en frío.

La norma internacional EN ISO 4957 también clasifica los aceros para herramientas, dividiéndolos en categorías de aceros no aleados y aleados.

Propiedades clave y su interacción

  1. Alta dureza. Este es un requisito fundamental, generalmente de 60 HRC o superior, para proporcionar resistencia a la deformación plástica bajo las altas fuerzas presentes en las operaciones de trabajo en frío. Una mayor dureza se correlaciona directamente con un mayor límite elástico, lo que evita que las herramientas se deformen permanentemente. Sin embargo, una dureza extremadamente alta puede reducir la maquinabilidad y la rectificabilidad.
  2. Alta resistencia al desgaste. Esta alta resistencia permite que las dimensiones de la herramienta se mantengan estables durante un largo periodo, prolongando así su vida útil. Este rendimiento se consigue principalmente gracias a una matriz dura (martensita) y a la presencia de partículas de carburo duro no disueltas.
  3. Buena tenacidad. La capacidad de resistir astillamiento, agrietamiento o rotura bajo cargas de impacto. La dureza y la tenacidad suelen ser inversamente proporcionales, por lo que es importante encontrar un equilibrio entre ambas. Para trabajos de impacto, la alta tenacidad es la consideración principal, mientras que la resistencia al desgaste es secundaria.
  4. Estabilidad dimensional. Cuando se requiere alta precisión en las herramientas, la estabilidad térmica de algunos aceros para herramientas cobra gran importancia. En estos casos, el acero de temple al aire es el material predilecto.
  5. Maquinabilidad. Las herramientas generalmente se suministran en estado blando y recocido para facilitar el conformado y mecanizado antes del temple final.

Composición y microestructura

Los aceros para herramientas de trabajo en frío contienen un mayor contenido de carbono (normalmente de 0,601 TP3T a 2,501 TP3T) en comparación con muchos otros aceros, lo cual es fundamental para lograr una alta dureza. Además, se alean con diversos elementos para mejorar propiedades específicas:

  • Cromo (Cr): Un formador de carburo moderado que contribuye significativamente a la resistencia al desgaste, especialmente en tipos con alto contenido de carbono y cromo (serie D). También mejora la templabilidad.
  • Molibdeno (Mo) y tungsteno (W): Si bien son menos frecuentes que en los aceros para trabajo en caliente o de alta velocidad, se pueden agregar para mejorar la templabilidad y contribuir a la resistencia al desgaste mediante la formación de carburos duros.
  • Vanadio (V): Forma carburos tipo MC muy duros (2300-3000 HV) que aumentan significativamente la resistencia al desgaste abrasivo.
  • Manganeso (Mn) y Silicio (Si): Contribuye a la templabilidad y, en el caso del Si, puede mejorar la maquinabilidad y la resistencia a la descarburación.

La microestructura de los aceros para herramientas endurecidos y trabajados en frío se compone principalmente de martensita templada con alto contenido de carbono y una dispersión de varios carburos.

  • Carburos: El tipo y la distribución de los carburos son cruciales. Los carburos M7C3 ricos en cromo son típicos de los aceros de la serie D, lo que proporciona una alta resistencia al desgaste. La cantidad de estos carburos aumenta con un mayor contenido de carbono y cromo. Los grados de menor aleación, como el O1, prácticamente no contienen carburos debido a un contenido insuficiente de cromo.
  • Austenita retenida (RA): En aceros con alto contenido de carbono y de alta aleación, puede retenerse algo de austenita tras el temple. Si bien la austenita puede absorber tensiones gracias a su ductilidad, la austenita retenida es indeseable, ya que reduce la dureza y puede causar inestabilidad dimensional al transformarse en martensita frágil bajo tensión, lo que provoca agrietamiento o astillamiento. El control de la AR se logra mediante la composición, la temperatura de endurecimiento y la temperatura de revenido. También se pueden aplicar tratamientos bajo cero (tratamientos criogénicos) para convertir la austenita retenida en martensita y mejorar así la dureza, la estabilidad dimensional y la tenacidad a la fractura.

Tratamiento térmico

Las propiedades deseadas de los aceros para herramientas de trabajo en frío se consiguen principalmente mediante procedimientos precisos de tratamiento térmico:

  1. Recocido. El propósito del recocido es reducir la dureza del acero para herramientas, facilitando su procesamiento. El proceso consiste en calentar el acero para herramientas a una temperatura alta y mantenerla durante un tiempo, seguido de un enfriamiento lento para lograr la uniformidad de la estructura y la formación de una microestructura suavizada, generalmente acompañada de esferoidización de carburo, para obtener un rendimiento óptimo de mecanizado.
  2. Temple. Este proceso implica calentar el acero para herramientas por encima de su rango crítico de temperatura para formar austenita y luego enfriarlo rápidamente para convertirlo en martensita dura. Los aceros para trabajo en frío se distinguen por su medio de temple: agua (serie W), aceite (serie O) o aire (series A y D). El temple al aire es preferible para minimizar la distorsión y maximizar la seguridad contra el agrietamiento. El temple al agua causa un choque térmico severo y distorsión. Estas varían significativamente según el grado; por ejemplo, O1 a ~790-815 °C (1450-1500 °F), A2 a ~980 °C (1800 °F), D2 a ~1010 °C (1850 °F) y W1 a ~800 °C (1475 °F).
  3. Revenido. Tras el temple, la martensita, dura y frágil, se recalienta a una temperatura intermedia (revenido) para ablandarla ligeramente, aliviar las tensiones internas y mejorar la tenacidad. Los aceros para herramientas de trabajo en frío suelen revenerse a bajas temperaturas (alrededor de 150-300 °C / 300-570 °F) para alcanzar una dureza elevada, generalmente de alrededor de 60 HRC.

Aplicaciones

Los aceros para herramientas de trabajo en frío se utilizan ampliamente en diversas operaciones de fabricación debido a su capacidad para soportar altas presiones, impactos y abrasión a temperatura ambiente o cercana a ella. Sus aplicaciones típicas incluyen:

  • Formando: Matrices de doblado, matrices de acuñación, matrices de estampación en frío (por ejemplo, W1, W2), matrices de extrusión en frío, matrices de trefilado (para alambre, barras, embutición profunda).
  • Esquila y corte: Matrices de corte, cuchillas de corte (en caliente y en frío), cuchillas (trabajo en frío).
  • Golpes: Punzones generales, punzones de perforación y matrices.
  • Misceláneas: Componentes de máquinas herramientas resistentes al desgaste, herramientas para trabajar la madera, herramientas de medición y sujetadores.
  • Aplicaciones resistentes a golpes: Los aceros de la serie S (por ejemplo, S1, S5, S7) se utilizan para herramientas que requieren alta tenacidad, como cinceles, moldes de prensado de polvo y corte con cizalla de placas gruesas.

Preguntas frecuentes

1. ¿Qué es el acero para herramientas trabajado en frío?

Los aceros para herramientas de trabajo en frío son una clase de aceros para herramientas que se utilizan en operaciones de mecanizado a temperaturas típicamente inferiores a 200 °C (390 °F), generalmente a temperatura ambiente. Están diseñados para ofrecer alta dureza, resistencia mecánica y resistencia al desgaste, lo cual se logra mediante tratamientos térmicos específicos y la presencia de carburos gruesos en su microestructura.

2. ¿Cuál es el mejor acero para trabajar en frío?

No existe un único acero "mejor", ya que la elección óptima depende de los requisitos específicos de la aplicación, buscando un equilibrio entre la resistencia al desgaste y la tenacidad. Entre los tipos más comunes se incluyen los aceros con alto contenido de carbono y cromo (serie D), los aceros de temple al aire (serie A), los aceros de temple al aceite (serie O) y los aceros resistentes a los impactos (serie S). Los aceros de alta velocidad (HSS) y los aceros para herramientas de pulvimetalurgia (PM) también ofrecen una excelente resistencia al desgaste para el trabajo en frío.

3. ¿Cuál es la diferencia entre el acero para herramientas para trabajo en caliente y el acero para trabajo en frío?

La principal diferencia radica en sus rangos de temperatura de operación y propiedades optimizadas. Los aceros para herramientas de trabajo en frío se utilizan para aplicaciones por debajo de ~200-260 °C (390-500 °F) y priorizan la alta dureza y la resistencia al desgaste. Los aceros para herramientas de trabajo en caliente se utilizan para aplicaciones por encima de este rango de temperatura (hasta 800 °C o 1472 °F) y se caracterizan por su resistencia en caliente, resistencia al ablandamiento a temperaturas elevadas (dureza roja) y tenacidad, a menudo con una dureza inferior a la de los aceros para trabajo en frío.

4. ¿Qué es el trabajo en frío del acero?

El trabajo en frío, también conocido como endurecimiento por deformación o endurecimiento por acritud, es la deformación plástica de un metal a temperaturas inferiores a su temperatura de recristalización, generalmente a temperatura ambiente o cercana a ella. Este proceso causa distorsiones en la estructura interna del metal.

5. ¿Cuál es el propósito del trabajo en frío?

Los principales objetivos del acero para trabajo en frío incluyen aumentar la resistencia, la dureza y la estabilidad dimensional o microestructural, así como mejorar la resistencia al desgaste. También produce un acabado superficial liso y limpio, logra una mayor precisión dimensional y puede mejorar la maquinabilidad al facilitar la rotura de las virutas.

6. ¿El trabajo en frío aumenta la dureza?

Sí, el trabajo en frío aumenta directamente la dureza del acero. A medida que aumenta la deformación plástica, la estructura interna se distorsiona, lo que dificulta una mayor deformación y aumenta tanto la resistencia como la dureza del metal.

7. ¿Cuál es la diferencia entre el acero frío y el acero normal?

El término "acero en frío" se refiere típicamente al acero sometido a un proceso de "trabajo en frío" (p. ej., laminado o estirado en frío) a temperatura ambiente, lo que aumenta su dureza y resistencia, y proporciona un mejor acabado superficial y control dimensional. El término "acero regular" puede referirse al acero laminado en caliente, procesado a altas temperaturas, lo que generalmente resulta en una superficie más rugosa y menor dureza, pero con mayor ductilidad inicial.

8. ¿El trabajo en frío disminuye el tamaño del grano?

No, el trabajo en frío por sí solo no reduce el tamaño del grano; distorsiona y alarga los granos existentes. El refinamiento del grano (reduciendo su tamaño) ocurre durante un tratamiento térmico posterior llamado recocido, que promueve la recristalización de granos nuevos y más finos tras el trabajo en frío.

9. ¿Cómo calcular el porcentaje de trabajo en frío?

El porcentaje de trabajo en frío se calcula generalmente como la reducción porcentual del área transversal o el espesor del material. Por ejemplo, una reducción de espesor de 70% significa que el espesor del material se ha reducido en 70% mediante trabajo en frío.

10. ¿Dónde se utiliza el trabajo en frío?

El trabajo en frío se utiliza ampliamente para mejorar las propiedades mecánicas del acero (como la resistencia y la dureza), lograr dimensiones precisas y acabados superficiales lisos, y mejorar la maquinabilidad. Se aplica en procesos como el laminado en frío de chapas y flejes, el trefilado en frío de barras y alambres, el estampado en frío, el acuñado y la extrusión, especialmente para componentes de automoción, aeroespaciales y de ingeniería general.

11. ¿A qué temperatura se realiza el trabajo en frío?

El trabajo en frío se realiza a temperaturas inferiores a la temperatura de recristalización del metal, generalmente a temperatura ambiente o cercana a ella. Aunque el proceso en sí puede generar calor debido a la deformación, el material generalmente comienza a temperatura ambiente.

12. ¿Cuáles son las ventajas del trabajo en frío?

El trabajo en frío mejora propiedades mecánicas como la resistencia, la dureza y el límite elástico, mejora el acabado superficial y la precisión dimensional, y permite una mejor reproducibilidad e intercambiabilidad de las piezas. También minimiza los problemas de contaminación y puede proporcionar propiedades direccionales deseables.

13. ¿Cuál es la diferencia entre el trabajo en frío y el recocido?

El trabajo en frío consiste en la deformación plástica a temperaturas donde el recocido no se produce rápidamente, lo que produce endurecimiento por deformación, mayor resistencia y menor ductilidad. El recocido es un tratamiento térmico que ablanda los materiales metálicos, alivia las tensiones internas y restaura la ductilidad mediante calentamiento y enfriamiento a una velocidad adecuada, revirtiendo a menudo los efectos del trabajo en frío.

14. ¿Cuál es la diferencia entre el acero para trabajo en caliente y el acero para trabajo en frío?

El "trabajo en caliente" y el "trabajo en frío" suelen referirse a la temperatura a la que está diseñado un acero para herramientas. Los aceros para herramientas de trabajo en caliente se utilizan para aplicaciones de alta temperatura (superiores a ~200 °C), que requieren dureza en caliente y resistencia al ablandamiento a temperaturas elevadas. Los aceros para herramientas de trabajo en frío se utilizan para aplicaciones a temperatura ambiente, centrándose en alta dureza, resistencia al desgaste y tenacidad. Por otro lado, el trabajo en caliente y el trabajo en frío también son procesos de conformado de metales que se realizan por encima y por debajo de la temperatura de recristalización, respectivamente.

15. ¿El trabajo en frío aumenta la ductilidad?

No, el trabajo en frío reduce la ductilidad del metal y aumenta su dureza y resistencia. Para restaurar la ductilidad y permitir una mayor deformación, suele requerirse un recocido intermedio.

16. ¿Qué es el acero inoxidable trabajado en frío?

El acero inoxidable trabajado en frío implica deformarlo a temperatura ambiente para aumentar su resistencia y dureza, y en ocasiones inducir la formación de martensita (especialmente en aceros austeníticos), a la vez que disminuye su elongación. Generalmente requiere fuerzas mayores que los aceros al carbono trabajados en frío debido a su mayor tasa de endurecimiento por deformación.

17. ¿El acero inoxidable 316 se trabaja en frío?

Sí, el tipo 316 es un acero inoxidable austenítico que se puede trabajar en frío81373. Los aceros inoxidables austeníticos, incluido el 316, suelen someterse a procesos de trabajo en frío, como el laminado en frío296482. El laminado en frío, incluso a temperaturas bajo cero, puede utilizarse para inducir martensita y aumentar su velocidad de endurecimiento por deformación373.

18. ¿Qué es el acero para herramientas de trabajo en caliente?

Los aceros para herramientas de trabajo en caliente son una categoría de aceros para herramientas diseñados específicamente para operaciones de corte o conformado donde la pieza o herramienta alcanza temperaturas elevadas, generalmente superiores a 200 °C. Su principal característica es la "dureza en caliente", lo que significa que conservan su resistencia y dureza a altas temperaturas. También presentan buena tenacidad y resistencia al desgaste en condiciones de calor. Ejemplos comunes son los aceros de la serie AISI H.

19. ¿Cuál es la diferencia entre el acero inoxidable y el acero frío?

El acero inoxidable se refiere a una familia de aceros aleados caracterizado por una alta resistencia a la corrosión debido a un contenido mínimo de cromo de 10.5…. El “acero frío” no es un tipo de acero, sino que generalmente se refiere a “acero acabado en frío”, que describe aceros al carbono o aleados que han sido procesados a temperatura ambiente (trabajo en frío, torneado, rectificado) para lograr características específicas como mayor precisión dimensional, acabado superficial más liso y mayor resistencia y dureza mediante endurecimiento por trabajo20…. Por lo tanto, el acero inoxidable es un material composición, mientras que “acero frío” se refiere a un método de procesamiento Se aplica a diversas composiciones de acero.

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